Recorrer cada espacio de tu
cuerpo es mi debilidad. Cierto. Besarte es un acto reflejo cada vez que te veo.
Pero… ¿Dónde quedó el brillo de tus ojos? Ya no eres el mismo, y no me he dado cuenta.
Lo siento. ¿Y si ya es demasiado tarde para que vuelvas a ser feliz? No lo
puedo permitir, y menos por mi culpa. No he sido capaz de ver más allá de una
apariencia, de una sonrisa tal vez falsa, o de un simple suspiro que decía
mucho más de lo que creía. Debería haber estado ahí contigo, como tú lo has
hecho en cada momento conmigo… pero me preocupé más de ser feliz yo que
preguntarme si tú lo eras realmente. ¿Y ahora? Ahora no puedo impedir que te
vayas o que encuentres a otra persona y rehagas tu vida. Aunque, antes de irte
quiero que cojas la pulsera que cuelga en tu mano, la mires y leas lo que pone…
“Siempre estarás a mi lado”. Sí. No lo olvides. Aquí permaneceré yo por si
vuelves algún día, no te preocupes. No hay nadie que ocupará tu lugar nunca. Intenta ser feliz, porque si tú lo consigues serlo, yo, por más que
duela, en nuestro pequeño rincón desde donde te cuido también lo seré a pesar
de que probablemente me hayas olvidado.
MEME ENCANTO! he leido muchos textos y son buenisimos *-* Este blog es genial.
ResponderEliminarUn beso y os espero en el mio!
¡Muchas Gracias! =) Claro que sí, no lo dudes ^^
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